Introducción
La declaración de emergencia en Venezuela a partir del 16 de marzo de 2020, a raíz de la
pandemia mundial por el virus Sars-Cov-2, fue uno de los acontecimientos que más trascendentales
de ese año. Esta situación obligó al Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria
(MPPEU, 2020; Decreto N° 4160, 2020) a plantearse medidas de contingencias que tuvieron como
objetivos organizar y conducir la identificación oportuna y articulada del coronavirus (Covid-19) en
la comunidad universitaria. Para tal fin, diseñó el Plan Nacional de prevención y contención para el
sector universitario, sus entes adscritos de gestión pública y privada.
En ese sentido, se establecieron medidas de atención, organización y preservación. Entre ellas,
la suspensión de todas las actividades de concentración masiva presenciales entre las cuales figuran
actos de grado, eventos científicos, culturales y deportivos, clases y evaluaciones de pre y
postgrado. Esto condujo a una desequilibrada situación, nunca antes vivida en el país.
Ante la realidad descrita, los docentes tuvieron que modificar las actividades académicas, en
especial, las relacionadas con Educación Física. Esta materia tiene como característica principal la
ejecución práctica. En ese sentido, se emprendieron una serie de tareas, en tiempos de cuarentena
social, para diseñar estrategias de enseñanza y de evaluación para iniciar la educación virtual,
adaptada a las metodologías planteadas en los programas Multimedios (2020) trasmitidos por el
canal del Estado, Venezolana de Televisión (VTV), diseñados por el Ministerio del Poder Popular
para la Educación Universitaria (MPPEU, 2020) del plan “Universidad en Casa”.
Desde ese contexto, los docentes de educación física tuvieron que reprogramar sus estrategias
de enseñanza, sus métodos y técnicas, para adaptarse a esa realidad y sumarse a diseñar estrategias
de enseñanza y de evaluación para ese momento. Aunado a esto, también se tuvo que tomar en
cuenta la rápida evolución de los entornos virtuales. Al respecto, Posso Pacheco et al. (2020)
señalan: “tan importante es establecer un proyecto de actividades para la Educación Física virtual
en tiempo de cuarentena como sostener la dinámica de estas actividades cuando ya esa cuarentena
se haya retirado y se vuelva a la normalidad” (p. 709).
Los autores citados hacen referencia a la importancia de sostener el proyecto de actividades de
educación física virtual después del confinamiento, para utilizar estas herramientas y combinarlas
con las actividades presenciales. Esta situación permitió la combinación de nuevas alternativas que
enriquecieron los recursos didácticos con tres tipos de estrategias de enseñanza: 1) la virtualidad, 2)
las clases offline y, 3) lo tradicional. En ese sentido, el docente de educación física tendrá la
habilidad de combinarlas según el contexto y objetivos.
Indudablemente, la crisis de la pandemia permitió la optimización de los métodos y de las
estrategias para mejorar la clase de educación física. Castillo y Contreras (2021) explican que la
implementación de la educación a distancia, apoyada en la combinación e integración de diversas
estrategias tecnológicas, ha brindado a las universidades venezolanas la oportunidad de facilitar a
los estudiantes el acceso a los contenidos educativos de cada unidad curricular. Además, ha
permitido mantener el contacto con la comunidad educativa y ofrecer retroalimentación sobre los
procesos de enseñanza y aprendizaje, a pesar de las limitaciones impuestas por la pandemia. Se