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Artículo

https://doi.org/10.56219/letras.v64i105.3274

1. Introducción: la reconstrucción histórica del léxico gastronómico hispánico

Si, ante el abandono en el que tradicionalmente se encontraba el estudio lingüístico de los textos culinarios del pasado (Gemmingen, 1995), señalaba hace veinte años Polo Cano (2005, p. 496) que “resulta necesario ampliar los trabajos diacrónicos a la tipología coquinaria” para que en el conocimiento histórico del español “se pueda dar cabida a toda la realidad lingüística de las obras gastronómicas ”, hoy se puede decir que, afortunadamente, tal llamada de atención ha sido ya atendida por parte de los investigadores, de manera que, en lo que se refiere a esta cuestión, la situación actual es muy otra. Así, es posible detectar, de un tiempo a esta parte, una multiplicación de los trabajos que tienen por objetivo describir desde diversos puntos de vista el léxico que identifica en distintos momentos del pasado el mundo de la alimentación y de la cocina en general, entre los que se debe señalar a manera de ejemplo las pioneras aportaciones de Eberenz (2014, 2016), así como Dalle Pezze y Sartor (2021), Dalle Pezze, De Beni y Sartor (2022) y muy especialmente los abundantes estudios de Torres Martínez (2012, 2014, 2017, 2020, 2021, 2022, entre otros).

De este modo, si bien es verdad que a día de hoy se cuenta ya con una información relativamente abundante que permite ir construyendo de manera más completa la historia léxica de la cocina española, no lo es menos que la enorme amplitud del tema y la necesidad de tratar aspectos muy variados determina que sea aún mucho lo que se desconoce al respecto, y no cabe duda de que entre estos ámbitos poco atendidos por la bibliografía se encuentra lo que tiene que ver con lo dialectal, y más concretamente con el vocabulario americano sobre esta temática: en efecto, una rápida revisión de los estudios disponibles constata que, con la notable excepción de Torres Martínez (2021b) y las notas puntuales de, por ejemplo, Fontanella de Weinberg (1987), la práctica totalidad de los trabajos existentes se centra en analizar corpus peninsulares, por lo que el devenir léxico de tradiciones culinarias de gran relevancia y originalidad −como la mexicana o la peruana − permanece aun completamente ignorado. Así las cosas, salta a la vista que esta ampliación diatópica al continente americano constituye uno de los grandes retos a los que se enfrenta el estudio histórico del vocabulario culinario, pues solo a partir de estos análisis −y de la consecuente integración del enfoque dialectal a tal estudio− será posible comprender la riqueza que, en el