Vol. 64 (105), 2024, pp.341-380 -Segundo semestre / julio-diciembre
ISSN-L 0459-1283 e-ISSN - 2791-1179
Depósito legal: pp. 195202DF47
Artículo
Página
351
https://doi.org/10.56219/letras.v64i105.3286
2011; Areiza y Velásquez, 2001; Hernández Jiménez, 2001; Aristizábal Alzate, 2007; ‘exageraciones’); Argentina (Enet, 1957, ‘comparaciones populares’); California, EE. UU. (Arora, 1961, 1977, ‘proverbial comparisons ’); Chile (Morales Pettorino, 1995, ‘locuciones comparativas’; Nieri Bravo, 2016, ‘dichos comparativos’); Cuba (Sánchez Fernández, 2010, ‘expresiones de ponderación máxima o superlativa’), Venezuela (Messina Fajardo, 2011, ‘comparancias’; Ramírez y Del Valle, 2013, ‘expresiones comparativas del habla cotidiana’); Perú (Pamo Reyna, 2016, ‘frase comparativa estereotipada’); Uruguay (Crida Álvarez, 2016 ‘comparativa estereotipada’); Costa Rica (Cordero Monge, 2018, ‘unidades fraseológicas con estructura comparativa’).
En relación con los campos léxicos a los que pertenecen los estereotipos de las comparaciones, Arora (1977) confronta los porcentajes de su corpus con otros obtenidos en estudios en Andalucía (Rodríguez Marín, 1899) y Argentina (Enet, 1957) (ver Tabla 1). Aunque los porcentajes de las tres recopilaciones son muy similares, la investigadora aclara que se trata de hallazgos aproximados, puesto que experimentó dudas en la clasificación individual de los estereotipos en las categorías establecidas, especialmente en los relacionados con “Fuerzas naturales”.
Tabla 1. Campos léxicos de comparaciones estereotipadas en tres variedades del español
Fuente: Traducido y adaptado de Arora (1977, p. 17)
Categoría |
Arora (California, 1977) |
Rodríguez Marín (Andalucía, 1899) |
Enet (Argentina, 1957) |
Animales (y partes de animales, incluidos seres humanos) |
48 % |
44 % |
52 % |
Objetos inanimados |
27 % |
26% |
26% |
Abstracciones |
10 % |
11 % |
7 % |
Plantas |
9 % |
12 % |
12 % |
Fuerzas naturales |
6 % |
6 % |
3 % |
García Zapata (2002) indica que los términos comparantes más usuales son los nombres de personas, lugares, fauna y flora; así como objetos, utensilios, alimentos y diferentes tipos de labores. Otros estudios han empleado diversas categorías para la agrupación de las comparaciones. Por ejemplo, Ayala (1993): personajes simbólicos, animales simbólicos, objetos ejemplares, detalles de la vida cotidiana, enfermedades y desgracias físicas, reglas morales o sociales infringidas, imposibles (vulgaridad y