Reseña  
Stephen King. Cuento de hadas  
(Traducción de Carlos Milla Soler). Plaza &  
Janés Editores S.A, 2022, 894 págs.  
Ríchard José Sosa Villegas  
Instituto Santo Tomás de Aquino  
Atlántico, Colombia  
Profesor en la especialidad de Castellano,  
Literatura y Latín; Diplomado en Metodología de  
la Investigación (UPEL-IPC); Docente de idiomas  
en el Instituto Santo Tomás de Aquino (Atlántico-  
Colombia). Sus publicaciones se encuentran en las  
revistas Dialéctica, Letras, Gaceta de Pedagogía,  
Laurus (UPEL-IPC), y Labdatam (Panamá).  
“…los deseos son como la belleza, cosas vanas”  
(King, 2012)  
Cuento de hadas fue publicada en septiembre de 2022 y es una obra surgida de la  
pluma del autor norteamericano Stephen King (Portland, Maine, 1947), un prolífico escritor  
de suspenso, misterio, ciencia ficción, literatura fantástica y terror, entre otros. Sus libros han  
vendido al menos 500 millones de ejemplares desde 1974, año en el que se publicó una de  
sus obras más insignes, Carrie. Hasta el momento ha escrito varias colecciones de cuentos,  
novelas cortas, libros de no ficción y unas 64 novelas. Entre algunas de las obras más  
emblemáticas de King se encuentran: El resplandor (1977), It (1986), Misery (1987),  
Apocalipsis (1990), por mencionar algunas.  
Respecto al estilo de escritura de Stephen King hay opiniones divididas. Diversos  
críticos y académicos han opinado que solo es un escritor comercial. De esta manera han  
dado por sentado que sus obras no poseen calidad literaria y, por lo tanto, siguen siendo  
motivo de rechazo por los círculos académicos. En este sentido, King ha sido juzgado por su  
estilo poco literario y la extensión de sus novelas, cuyos finales suelen ser reprochados. Para  
Reseña  
otros su narración, la construcción de sus personajes, la descripción del ambiente y su  
capacidad de transmitir emociones a los lectores se ha convertido en un sello personal del  
autor y, por ende, motivo de elogios. Asimismo, King ha obtenido diversos premios literarios  
como: Bram Stoker, British Fantasy, Locus, Mundial de Fantasía, Edgar, Hugo y O. Henry,  
que lo posicionan como uno de los autores más influyentes en la literatura y sin duda, uno de  
los más leídos.  
Ahora bien, en relación con Cuento de hadas, debe señalarse que posee una hermosa  
portada de color azul, tanto en su versión en inglés como en español. En esta se presenta la  
imagen del joven protagonista Charlie, y su compañía canina Radar, descendiendo con una  
antorcha por unas escaleras en forma de espiral. La novela cuenta con una extensión de 894  
páginas, 32 capítulos con extensión variable y subdivididos en algunos casos por números  
ascendentes. Cada capítulo de la obra está titulado y pueden destacarse los siguientes: El  
maldito puente, La cosa del cobertizo, La carretera del Reino, Tempus est umbra in mente,  
El túnel y la estación, entre otros. Asimismo, en el interior de la novela se encuentran un  
total de 33 ilustraciones en blanco y negro que se presentan al inicio de cada capítulo y se  
relacionan con este, adicionándole mayor fuerza al discurso narrativo de King, pues aportan  
mayores detalles al lector y le permiten recordar uno de los rasgos de los cuentos de hadas  
clásicos, las ilustraciones. Concluye la historia con un epílogo como cierre o conclusión de  
la obra, pero dejando abierta la posibilidad de retomar la historia a futuro. Además, se  
encuentran las páginas de agradecimientos y una breve biografía del autor como elementos  
finales de la novela.  
En relación con el contenido de la novela, el autor utiliza un ritmo pausado con su  
habitual descripción para narrar la historia del joven Charlie Reade y su amistad con el  
ermitaño anciano, Howard Bowditch. Ese hombre otorga una pesada responsabilidad en los  
hombros de su amigo, debido a que en el cobertizo de la mansión donde vive se esconde un  
intrigante secreto que nadie debería conocer. Ahí se encuentra el acceso a un inhóspito mundo  
en el que el mal se expande, intentando despertar. Es bajo esta premisa fundamental que se  
desarrolla Cuento de hadas, una especie de exploración de la fantasía épica por parte del  
autor. En esta historia, calcada de los cuentos de hadas tradicionales, la trama girará en torno  
a la antigua lucha entre el bien y el mal, teniendo que enfrentarse sus personajes a monstruos,  
Reseña  
hechiceros y demás criaturas malignas con la finalidad de salvar sus vidas y restaurar el  
orden natural de las cosas.  
Sobre la novela de King son resaltantes varios aspectos, como el tipo de narrador en  
perspectiva de primera persona. A través de los ojos de Charlie y su voz, se perciben con  
absoluta nitidez todas las reflexiones, pensamientos y acciones que se generan durante su  
travesía, introduciendo al lector en dicho viaje. Asimismo, la elaboración de diálogos de corta  
extensión permite que la lectura sea bastante fluida y en esta ocasión, se convierte en un  
aspecto positivo de la obra. También, la descripción en el cuerpo de la novela nutre el  
escenario o ambiente para ubicar al lector de manera paulatina dentro del mundo creado por  
King. En relación con el tiempo narrativo, este se encuentra bien cuidado. Es un tiempo  
sencillo y lineal que el lector puede seguir sin ningún infortunio. A través de un lenguaje  
natural como es el caso del escritor, este logra hilvanar una historia de fácil comprensión para  
sus lectores sin hacer uso de recursos complejos o una narrativa enrevesada.  
En relación con la construcción de los personajes, existe un amplio contraste entre  
ellos. Los mismos son en apariencia entes comunes. Desde el protagonista de la historia,  
Charlie Reade, hasta sus ayudantes y los respectivos antagonistas, que son seres de otro  
mundo. No obstante, son personajes en constante cambio. En el caso de Reade, explora las  
posibilidades de un mundo distinto y comienza un viaje iniciático como joven-héroe a través  
de una catábasis o descenso a los infiernos, y una posterior anábasis o ascenso, siendo esto  
un elemento clave de la fantasía épica y la lucha entre el bien y el mal. Asimismo, hay algunas  
pistas simbólicas e intertextuales de las hace gala el texto, que aluden a obras universales  
como: Alicia en el país de las maravillas, El mago de Oz, Jack y las habichuelas mágicas,  
La historia interminable, La Biblia, La guerra de las galaxias, La feria de las tinieblas y la  
conocida saga Juego de tronos, además de personajes literarios como Sherlock Holmes e  
Iñigo Montoya, e históricos como Charles Dickens y Jack el destripador, entre otros. Además,  
se alude a obras del Kingverso, como se les conoce a las relaciones intertextuales con las  
propias obras del autor, entre las que se destacan Cujo y su aclamada saga, La torre oscura.  
En el caso de la obra que se ha reseñado, es un libro apasionante cargado de elementos  
narrativos destacables como los mencionados en líneas precedentes. Es oportuno recalcar  
que se trata de una novela dentro de un subgénero poco explorado por Stephen King, como  
Reseña  
es la fantasía épica, y tiene sus fortalezas en este sentido como best seller. Sin embargo, se  
advierte al lector que no debe esperarse alguna novedad dentro de este género tan  
aprovechado en los últimos tiempos. Por otro lado, quizás para algunos lectores en ciertos  
momentos la obra podría hacerse tediosa debido a su extensión y la descripción, pero la trama  
y sus ilustraciones puede ser un elemento clave para mantenerse atado a la lectura hasta  
culminarla.  
En conclusión, Cuento de hadas posee un argumento interesante a partir de un  
lenguaje muy sencillo. Los personajes son destacables y su evolución es notoria en la medida  
en que transcurre la historia. Se acentúan elementos propios de la fantasía épica como la  
lucha entre el bien y el mal, la evolución del héroe y su viaje iniciático. Asimismo, el uso del  
narrador en primera persona puede ser un elemento positivo para que el lector se identifique  
con el personaje protagonista y quiera desentrañar la historia de Charlie, su fiel compañera  
Radar y el mundo de Empis. A fin de cuentas, es un atípico cuento de hadas que dista mucho  
de iniciar con la conocida frase: “Érase una vez…”; y sin duda, una buena opción de lectura.