gramaticales, como género, número y transitividad, que se verán reflejados en el orden de
las entradas. De la misma manera, se clasifica la voz según si es sustantivo, verbo o adjetivo.
Pocos diccionarios lingüísticos actuales indican la caída en desuso, sin tener en cuenta
que una palabra que ha caído completamente puede recuperarse, volver a circular entre los
hablantes (Bajo, 2000, p. 26). Esta investigación tiene como base algunas palabras
obsolescentes, con lo cual buscamos abordarlas correctamente para demostrar que cada
entrada léxica es relevante.
Es de tener en cuenta que autores, como Lara (2006) indican que las palabras están
intrínsecamente vinculadas a la experiencia del mundo y de la vida, las cuales varían con el
tiempo y el espacio; además de depender de la singularidad de cada experiencia humana, la
cual se comparte socialmente. Asimismo, hace hincapié en que el léxico es ilimitado, por lo
que es crucial planificar con cuidado cómo recolectamos la información (p. 147). El autor
invita a reflexionar sobre lo significativa que es la escritura en los procesos de comunicación
y preservación de discursos, puesto que ayudan a trascender la memoria individual y
construir una memoria colectiva, los diccionarios son ejemplos de esto. (p. 143).
De acuerdo con Lara (1996), los lingüistas y lexicógrafos emplean métodos de
encuesta lingüística para recopilar datos sobre el uso del lenguaje por parte de los hablantes
nativos. Estas encuestas pueden incluir entrevistas, cuestionarios y observación participante,
lo que permite capturar el uso auténtico y contextualizado del lenguaje en diferentes
situaciones comunicativas. Además, se analizan los datos recopilados para identificar
patrones lingüísticos y determinar la forma más utilizada de una unidad léxica. Así mismo,
el autor plantea la pertinencia de preguntar durante el transcurso de la investigación ¿qué
cosa es esa? ¿cómo se llama eso? y ¿qué significa esa palabra?, entre otras. Estas cuestiones
son fundamentales en la investigación para obtener una comprensión más profunda del uso
del lenguaje y su significado. (Lara, 1996, p. 114).
En palabras de Lara (1996), podemos definir la entrada como "una unidad de
recuperación de información lexicográfica, determinada por la teoría del acto verbal que
genera al diccionario" (p. 121). Este autor argumenta que la inclusión de una palabra en el
diccionario puede determinarse a través del intercambio verbal de respuestas sobre su
significado. Es decir, quien responde selecciona una palabra que corresponde a la pregunta,