adelgazar); los de preelaboración (golpear, cortar, picar, rallar, pelar), de elaboración
(ablandar, batir, mezclar, remojar, rociar); técnicas (hervir, asar, freír, fritar), así como los
procesos de conservación (salar, enfriar).
El campo de los utensilios exhibe un léxico propio del español general, olla de hierro,
mortero, batea. Las unidades de medida corresponden a las de masa, medidas en la capacidad
de un recipiente (taza, cucharada), las de conteo (gotas), imprecisas (un poco, bastante) y
precisas, entre las cuales se percibe el uso de la palabra en extenso, abreviaciones y los
símbolos de algunas unidades de medida.
Los calificativos corresponden a adjetivos conformados por derivación diminutiva
(menudito, espesito, guisaditas, doradito), que proporcionan un tono apreciativo al discurso,
los derivados de sustantivos (gomosa), así como derivados de verbos (rallado, cocida).
4. Cierre y proyecciones futuras
A partir de los hallazgos, se puede aseverar que el recetario de Livieres de Artecona
(1931) perfila la identidad cultural del Paraguay de la época. Se vislumbran costumbres
gastronómicas conservadas y otras que se desvanecieron en algún momento de la historia,
las cuales comportan valores identitarios y simbólicos. En ese sentido, las tradiciones
culinarias vistas demuestran, tal como lo señala Torres Martínez (2020, p. 231), “que la
cocina, ámbito doméstico relegado habitualmente a lo cotidiano, se alza como un
componente social importante y, por tanto, como marcador de identidad de las comunidades”.
La obra estudiada posee características estructurales de los recetarios básicos de
organización binaria. La enunciación se efectúa en la modalidad imperativa con
preeminencia de la tercera persona; aunque se identifican algunas en primera y segunda
persona. Por otra parte, los nombres de las recetas corresponden a sintagmas nominales.
El léxico utilizado en los títulos de los platos descritos, además de voces del español
general, contiene guaranismos, cuya escritura pone de manifiesto los mecanismos de
adopción de los préstamos, algunos se ajustan a la grafía española, en su forma pura con la
ortografía del momento, así también frecuentes americanismos, marcas registradas,
arcaísmos, entre las cuales se corrobora que algunas de las voces detectadas carecen de la